Esta receta es ideal para el picoteo o para acompañar ensaladas y verduras.
Se pueden hacer numerosas versiones, pero la original e insuperable, es el de garbanzos, no por ello no dejemos de probar la de lentejas, pesto, remolacha, etc.
Uno de sus ingredientes, el tahini se puede comprar ya preparado o hacerlo nosotros mismos, es muy sencillo.
Os pondré la receta pronto.
Escurrimos bien los garbanzos, guardando el agua para utilizarla más tarde, e introducimos en el vaso de la batidora o de un robot de cocina. Añadimos el diente de ajo pelado, el tahini, el zumo de limón, el comino, la sal.
Trituramos hasta obtener una masa homogénea.
Incorporamos el aceite de oliva.
Continuamos triturando unos minutos hasta obtener una mezcla que sea cremosa.
Añadimos el yogur y terminamos de mezclar, si fuera necesario se puede añadir un poco del caldo que tenemos reservado, se debe ir añadiendo poco a poco hasta que tengamos la textura deseada.
NOTA: Si no tenéis yogur podéis obviar, esta igualmente muy rico.