Pan casero fácil y rápido
Description
La receta de pan casero con harina común es la más sencilla que se puede realizar con total garantía de éxito.
Este pan siempre os saldrá bien y no necesita levado y es optimo para poner antes de cualquier otro horneado ya que a medida que se va calentando el horno se va cociendo el pan.
En poco más de una hora esta hogaza estará lista.
En esta elaboración he usado harina común, pero también se puede mezclar con harina integral o totalmente integral.
Un apunte, la levadura fresca se puede sustituir por levadura seca de panadería.
Ingredientes
Instructions
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Comenzamos a preparar la masa
Lo primero es hidratar la levadura.
Ponemos un poco de agua en un vaso o bol pequeño y agregamos la levadura y el azúcar.
Removemos (más o menos 2 minutos) con una cuchara mejor de madera, hasta que la levadura se disuelva por completo.
En un bol grande, ponemos los 325 ml de agua templada, el resto la reservamos por si nos hace falta, añadimos la levadura hidratada, el aceite de oliva y 5 cucharadas de harina.
Mezclar bien, debe quedar todo bien integrado, tapamos con un paño y lo dejamos reposar a temperatura ambiente unos 20 minutos.
Pasados los 20 minutos, veremos que la masa se ha llenado de burbujas y habrá crecido levemente. Es el momento de incorporar la harina.
Transcurrido el tiempo de reposo incorporamos el resto de la harina, la sal y mezclamos bien hasta que ya no podemos más ya que se habrá vuelto muy espesa.
Espolvorearemos la superficie de trabajo con harina y volcaremos la masa sobre ella.
Nos engrasamos las manos con aceite y amasamos durante un par de minutos, no necesita más.
Formamos una bola con la masa y la dejamos reposar una media hora tapada con un paño encima de la encimera que tenemos enharinada.
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Preparamos el pan
Untaremos un poco de aceite en el papel de horno, así como el interior del molde que servirá para hornear.
El molde que yo he usado mide 22 cm de diámetro.
Tras los 30 minutos de reposo, la masa ya estará lista para hornear.
Nos untaremos bien las manos con aceite y procedemos a quitar el aire de la masa pellizcándola.
Dale forma de pan redondeado y pasa la masa al molde que tenemos preparado o a una bandeja de horno cubierta con papel de hornear.
Con un cuchillo trazaremos un par de cortes a la masa.
Espolvoreamos con un poco de harina para darle un aspecto rústico a nuestro pan.
Tapa la masa con la tapa del molde, esto servirá para que la humedad del pan no se escape y el pan crezca mucho más. Si no tenéis molde tapar la masa con cualquier olla lo suficientemente alta para que pueda subir nuestro pan.
Colocamos la bandeja con el pan en el horno apagado y frío.
Encendemos el horno a 200ºC y horneamos durante 45 minutos, con calor arriba y abajo.
Comprobamos que está hecho dándole los tipicos golpecitos al pan, debe sonar a hueco. Si le falta un poco de dorado podemos dejarlo un rato más, eso sí vigilándolo no nos pasemos.
Retiramos el pan del horno, lo quitamos del molde y colocaremos el pan encima de una rejilla para que se enfríe.