Este pan relleno de carne es una de las recetas más fáciles y deliciosas que se pueden hacer.
Ideal para cualquier de las comidas diarias y se destaca lo esponjoso que queda sin necesidad de encender el horno.
Cocinado en la sartén, es súper suave con una miga ligera y alveolada, una receta fácil, rápida e infalible.
Este pan es perfecto para hacer bocadillos de todo tipo, puedes hacerlo en formato normal o mini, rellenarlo de dados de pollo, carne picada o con pescado. O simplemente con una variedad de verduras al gusto.
Diluimos la levadura con un poco de agua tibia
Ponemos en un bol la harina, la sémola y la sal en uno de los lados de la harina.
Añadimos la levadura y finalmente añadiremos el agua, según la calidad o poder de absorción de la harina, pueden variar las necesidades de agua, mejor empezaremos poniendo un poco menos de la cantidad que tenemos e iremos añadiendo más si al amasar ves que le falta. Del mismo modo, si la masa queda muy seca, puedes necesitar añadir más cantidad de agua.
Mezcla todo hasta que todos los ingredientes se hayan unido bien.
Pasa la masa a la superficie de trabajo, amasaremos durante 10 minutos, hasta obtener una masa elástica, fina y homogénea, apenas pegajosa, es muy similar a la del pan normal. Déjala reposar unos 30-45 minutos, tapada, debe doblar el volumen.
Mientras prepararemos el relleno.
Ponemos una sartén antiadherente al fuego medio, úntala con un poco de aceite de oliva, ayudándote de un pincel o si no tienes con una servilleta de papel. Cuando la sartén esté caliente, pon los panes en tandas, no deben tocarse, durante la cocción se van a ir hinchando. Le daremos la vuelta dos o tres veces con una espátula y con cuidado, durante la cocción.
Si lo deseas, también se puede cocinar en el horno para ello deberás poner un papel de horno en la bandeja y los hornearemos a 200ºC durante 35 minutos, horno arriba y abajo.